Existen esencialmente cuatro opciones disponibles para cualquier persona que pierda un diente, o varios dientes. Estas son: dejar el hueco tal y como está, llevar dentadura postiza, colocar un puente o colocar implantes dentales. 

No recomendamos la primera opción, ya que dejar un hueco en los dientes, por imperceptible que sea, no es una buena idea y puede dar lugar a problemas como dientes desalineados con el paso del tiempo.

Tanto las dentaduras postizas como los puentes existen desde hace mucho tiempo y ambos cumplen en cierta medida la función de sustituir un diente perdido. 

Sin embargo, ninguno de los dos está exento de inconvenientes, ya que las dentaduras postizas a veces son incómodas y potencialmente inestables para algunos usuarios, mientras que un puente puede requerir que se preparen dientes sanos para que el puente pueda fijarse.

En Bradley and Partners Dental and Implant Clinic creemos que, en la mayoría de los casos, los implantes son la mejor opción para nuestros pacientes. 

Requieren alguna cirugía dental menor, seguida de un tiempo de cicatrización más largo, pero en general este tratamiento relativamente moderno proporciona quizás la mejor solución a largo plazo para reemplazar los dientes perdidos.

Echemos un vistazo a algunos de los beneficios más significativos de tener implantes dentales para reemplazar los dientes perdidos.

Longevidad

Aunque la colocación de implantes es un procedimiento bastante largo en comparación con la mayoría de los tratamientos dentales, también proporciona una solución duradera al problema. 

A diferencia de muchas restauraciones dentales que pueden necesitar ser sustituidas al cabo de unos años, los implantes pueden durar veinte años o más una vez que se han integrado con éxito en el hueso de la mandíbula. 

Esto dependerá en gran medida de lo bien que los cuide, pero afortunadamente esto es bastante sencillo de hacer y no requiere una limpieza complicada, a diferencia de las dentaduras postizas, por ejemplo. Más adelante hablaremos de la limpieza de los implantes.

Resistencia y estabilidad

Aunque las dentaduras postizas y los puentes ofrecen un cierto nivel de resistencia, no se acercan ni de lejos a la resistencia de los implantes. Esto significa que, una vez completamente integrado, puede utilizar su implante dental exactamente igual que lo haría con un diente natural sano. 

Esta resistencia también está relacionada con la estabilidad del diente. Mientras que las dentaduras postizas a veces pueden moverse un poco en la boca, el implante sustituye a la raíz del diente perdido y proporciona un anclaje extremadamente seguro para fijar la corona.

Comodidad

Aunque puede haber un breve periodo de transición tras la colocación del implante en el que las cosas pueden sentirse un poco extrañas, una vez que se haya acostumbrado a su nuevo diente de sustitución, no hay ninguna razón por la que necesite pensar en él en su día a día, salvo para limpiarlo correctamente. 

Aspecto

El implante suele ser de titanio y queda oculto bajo la encía. Lo que sí se ve es la corona que está unida a él. En Bradley and Partners Dental and Implant Clinic sólo utilizamos coronas dentales de alta calidad que son fuertes, resistentes a las manchas y de aspecto natural.

Capacidad para comer

Uno de los mayores inconvenientes de las prótesis dentales es que, después de probar un poco, muchas personas renuncian a comer ciertos alimentos porque son difíciles de masticar con sus prótesis dentales. 

Este no es el caso de los implantes dentales y no hay ninguna razón por la que deba evitar su comida favorita, por muy “difícil” que sea de masticar. Un implante sano lo hará con la misma facilidad que un diente natural sano.

Retención del hueso maxilar

Una diferencia importante entre las prótesis/puentes y los implantes es que la colocación de implantes es la única que sustituye no sólo la parte de la corona del diente, sino también la raíz. 

Colocar una raíz dental artificial significa que el hueso de esa zona no es reabsorbido por el cuerpo, como ocurre con las dentaduras postizas y los puentes. Esto evita la posibilidad de que los dientes se muevan y cambien la forma de la cara.

Facilidad de limpieza

Tanto las dentaduras postizas como los puentes son bastante engorrosos de limpiar y hacen que hacerlo sea un proceso laborioso. En cambio, los implantes dentales no requieren nada de esto y pueden limpiarse simplemente como si se tratara de un diente natural.